15 de abril de 2008

EL ORIGEN

“Hey hey, my my rock and roll can never die
Neil Young

¿Se podría objetar que en 1954 se inventó el rock and roll? Tal vez. Aunque la respuesta no sería del todo exacta. Sin duda, 1954 fue un año importante en el que rock and roll comenzó a dar sus primero pasos. Entonces, ¿será 1955 el año donde dicho género maduró? Posiblemente. Todo el mundo tiene ideas propias acerca de los orígenes del rock and roll, pero una cosa es cierta: a mediados de esta década, la bomba ya había estallado y el paisaje estaunidense de la clase media sana y conservadora había cambiado. De pronto, un tipo llamado Elvis Presley apareció un domingo por la noche en un programa televisivo moviendo las caderas, un gesto por demás amenazador para la moral, un chico blanco cantando como negro. No tardaría mucho tiempo para que las masas lo convirtieran en Rey. El Rey Elvis Presley. Pero en realidad ¿Elvis es el rey? Si Elvis es el rey, ¿qué grado de jerarquía ocupará un Check Berry, un Little Richards, un Muddy Waters, un Ray Charles?

Seguro los tatarabuelos de estos negros venían en aquellos barcos exploradores británicos y españoles del siglo XVI que empezaron a establecerse en Norteamérica. Esclavos que llevaron al Nuevo Mundo sus creencias religiosas, así como su música y sus canciones tradicionales.

Por eso, habrá que agradecerle antes que a Norteamérica, a África, la base y los orígenes del rock and roll. Sociedades tribales africanas, donde el ritmo era algo más que un elemento musical, constituía un lenguaje en sí mismo. Como elemento clave de comunicación, los ritmos africanos desarrollaron una rica complejidad. Entre los siglos XVI y XIX, la cultura del tambor llegó a América con los esclavos y el cruce de influencias fue inevitable. Las comunidades de esclavos absorbieron la música religiosa y el folk europeo.

El rock and roll se desarrolló a partir de raíces muy diversas: el blues, y el gospel de los afroamericanos, el folk y la música country de los estados del Sur y del Suroeste, de EU, la música del Caribe, el jazz de Nueva Orleáns, el pop de Tin Pan Alley...Pero, sin duda, fue el blues, el estilo que más profundamente marco al rock and roll. El blues se desarrolló en los estados del Sur durante las primeras décadas del siglo pasado. Una música cargada de desesperación y esperanza a la vez, cuyas fuentes se encuentran en las canciones campesinas y en los temas folk, así como en los cantos de los talleres y lugares de trabajo. En el blues, la composición, que se basa en doce compases, se creó como una llamada y respuesta entre la guitarra y la voz. En los años veinte y treinta, Charley Patton, Robert Jonson y Blind Lemon Jefferson grabaron los primeros discos de blues, que contribuyeron a la difusión del género.
Pese a la abolición de la esclavitud después de la guerra de Sucesión muchos negros vivían en la miseria más absoluta, trabajando a cambio de casi nada en los campos de algodón del Sur. Para ellos ciudades del Norte siempre actuaron como un imán. En 1949, por ejemplo, un negro podía llegar a ganar en Chicago 1.900 dólares al año, mientras que en la zona del Misisipi la cantidad no superaba los 439 dólares.

Durante la Segunda Guerra Mundial, los centros industriales del Norte vivieron una época de expansión y hacia ellos emigraron los afroamericanos, dejando atrás las granjas rurales del Sur. Muchos negros del Misisipi solo llegaron hasta Memphis, que hacia 1948 contaba con 40% de población negra. Otros se trasladaron a Nueva York, Detroit o Cleveland. Pero fue Chicago, comunicada por varias líneas férreas, la ciudad que atrajo más emigrantes. Allí, una comunidad de intérpretes de blues sureños recién llegados empezó a utilizar instrumentos eléctricos, lo que contribuyó a que el blues diera un nuevo paso. A finales de los cuarenta, Muddy Waters había formado un conjunto eléctrico que resultó fundamental para las bandas de rock and roll.

El gospel también tuvo un profundo impacto en el rock and roll. La influencia de grandes cantantes tales como Clara Ward, Mahalia Jackson y Sister Rosetta Tharpe queda patente en la fervorosa intensidad de su sentimiento, uno de los principales elementos de la nueva música.
Por su parte el country (denominado por algunos como el blues de los blancos) al igual que el blues rompió las barreras raciales: Chuck Berry y Elvis, por ejemplo estaban profundamente influidos por ambos estilos. El country no era otra cosa que baladas tradicionales acompañadas de instrumentos de cuerda como el violín. Canciones como las de Hank Williams expresan con una sinceridad llena de arte la angustia del desamor o de los placeres de una noche en la ciudad.
El folk es otro testimonio de primera mano de la vida cotidiana de Estados Unidos. El compositor folk observa las tragedias y los triunfos del país y luego sintetiza sus reflexiones en forma de canción. La música folk no tiene origen racial o geografico; dos de los artistas folk mas influyentes fueron Huddie Ledbetter, alias Lead Belly, un negro del Sur, y Woody Guthrie, un blanco de lo estados del Medio Oeste. Su influencia en la música popular fue muy directa, artistas como Bob Dylan entre otros, siguieron sus pasos y empezaron a escribir canciones que instaban al país a afrontar los problemas sociales.
El rhythm & blues, es el precursor directo del rock and roll, una fusión de géneros desde el blues, el swing, el boggie-woogie y el gospel. Una música que causó sensación a finales de los cuarenta y durante los cincuenta. Obras estupendas a cargo de sus dos principales figuras: Ray Charles y Louis Jordan.
Jordan con un estilo desmadroson, siempre divertido, alegre, de buen humor y de una energía que no eclipsaban su talento. En los primeros éxitos del rock and roll de Billy Haley and the Comets hay muchas reminiscencias de Louis Jordan y sus Tympany Five..

El blues y la música country llegaron al Sur, así como su hibrido el rockabilly. Memphis cuna artística de Elvis Presley y B.B king, era un fértil lugar de encuentros de diversas tendencias que allí se fusionaba. Más al sur, en Nueva Orleáns, los ritmos estaban influidos por los ritmos latinos que llegaban a dicha ciudad portuaria. Vibrantes ritmos de una de las estrellas más brillantes de la ciudad, surgían a cargo de Fats Domino. A finales de los cuarenta y principios de los cincuenta, el blues de Chicago se convirtió en género propio y artistas como Muddy Waters, Howlin Wolf y Little Walter, dotaron al estilo de un carácter emocional y un sonido duro. Mientas en NuevaYork proliferaban los grupos vocales. Al principio, eso grupos eran exponentes del rhythm & blues, pero en seguida evolucionaron hacia el rock and roll. La música gospel también florecía y muchos de los cantantes jóvenes de R&B procedían de los coros de las iglesias. En Los Angeles y Texas se desarrolló un estilo propio más elaborado al igual en Detroit y Filadelfia. Posteriormente, gracias a la labor de pioneros como Chuck Berry, todos estos estilos musicales empezaron a fusionarse y a transformarse. El resultado todos lo conocemos: el Rock and Roll. 

BLACK REBEL MOTORCYCLE CLUB. (HOWL - 2005)




Black Rebel Motorcycle Club
Howl (2005)

El origen de su nombre proviene de una de una de las mejores películas de los 50s, El Salvajeinterpretado por Marlon Brando, que encabeza a una pandilla de motociclistas que se hacían llamar Black Rebel Motorcycle Club.

Originarios de San Francisco, y hoy radicados en Los Angeles, BRMC es sin duda alguna mucho más que la mayoría de grupitos indies que hoy abundan por todos lados. Con dos álbumes anteriores, el homónimo BRMC  (2001) y el Take Them On Your Own (2003) en donde se escuchan claras y valiosas referencias, que van desde grupos setenteros como The Stogees, The Velvet Underground, The Ramones y The Sex Pistols, hasta grupos de culto de los ochentas, dígase Joy Division, The Stone Roses y más de cerca a The Jesus And Mary Chain, hasta grupos del noise de principios de los noventas como Ride y My Blody Valentine. Estas dos placas tienen una combinación de discos memorables; el Funhouse”, el “Daydream Nation”, el “Sticky Fingers”, y por supuesto, el “Psychoçcandy.

Desde sus inicios la banda formada por Peter Hayes en la guitarra, bajo y voz, Robert Been, guitarra, bajo y voz, y Nick Jago, batería, fueron rápidamente comparados con grupos como The Strokes, The White Stripes o los mismos Kings of Leon, grupos mediaticos que poco tenían que ver con la banda californiana. La muestra se encuentra en su más reciente material llamado Howl (nada tiene que ver con el poema homónimo de Allen Gisnberg) que marca no solo su mejor disco, sino que se alejan por el momento de los sonidos sucios y setenteros, va más allá de sus influencias británicas que los caracterizaba (no por nada son los rockeros americanos con más sabor ingles) para entregarnos un disco distinto de sus dos álbumes previos.

A pesar de haber sido echados en el 2004 de Virgin Records por no cumplir las expectativas del sello, a raíz del oscuro y denso Take Them On Your Own (2003) (recibido con extrema frialdad por la critica y por un público tal ves cansado de nuevos chicos rockers) y para variar un incidente en Edimburgo, todavía envuelto en un misterio, provocó la partida (o expulsión) de la banda del baterista Nick Jago, que por cierto más tarde se reincorporaría para una breve participación de Howl.  A pesar de todo eso, los BRMC sorprendió a propios y extraños con uno de los mejores discos del 2005, bajo el sello discográfico de Echo en el Reino Unido y RCA en EUA.

Howl, es un disco simple, sin artificios y con marcado espíritu acústico y melancólico. Una perfecta mezcla de rock psicodélico, de folk, de blues, de gospel y un poco de country. Tal es el caso de blues acústico con persistente y estupenda armónica en cortes como “Shuffle Your Feet”, “Ain't No Easy Way”, “Restless Sinner”, el folk en “Devil's Waiting”, “Fault Line”, “Complicated Situation”, y toneladas de gospel en las letras “Gospel Song” , la estupenda “Weight Of The World”, una balada al piano de clasicismo sorprendente como lo es Promise” o “Open Invitation”, el corte escondido del final, en el que parecemos encontrarnos incluso con la voz de Elvis Costello,
El tercer álbum del trío estadunidense está cargado de sonidos clásicos y a la ves emocionantes. Referencias claras de Bob Dylan y de Neil Young, de Buffalo Springfield y de Jonhy Cash.

Howl es un disco de cabecera, lleno se sensibilidad, cálido, sólido, “novedoso”, primitivo, áspero, “americano” y sobre todo, un disco de verdadero rock n roll.

Días de Reposo


Jamás había sentido tantas ganas de embriagarme como la primera vez que asistí a AA (Alcohólicos Anónimos). Llegué un lunes por la tarde a dicho lugar. Inmediatamente me presentaron ante toda la bola de alcohólicos “regenerados”. Enseguida comenzó la sesión. Relatos de personas sobre su alcoholismo y todos los problemas que trae consigo. Notaba cierta hipocresía en sus palabras, pero al mismo tiempo me divertía con historias entretenidas y fascinantes. Había momentos de reflexión, me daba cuenta que no había bebido y vivido lo suficiente y eso me encabronaba. Era un borracho aburrido.

Los ocho días de sobriedad en ese apestoso lugar, se convirtieron en los más espantosos, angustiantes y desesperantes en mis 45 años de vida.

Nunca entendí la dinámica, contar tu historial alcohólico lo considere de mal gusto. ¿Por qué se debía de enterar toda esa bola de holgazanes chismosos sobre parte de la estrecha relación de tu vida y el alcohol?

Por supuesto que no les dije de las constantes putizas que le propinaba a mi esposa, no por cobarde, ni marica, sino porque no sentía ningún tipo de remordimiento, lo que los cabrones buscaban era precisamente que todos los presentes cargáramos con semejante culpa. Por mi parte no me arrepentía de nada.

Mi padre seguramente se sintió orgulloso de que finalmente siguiera un consejo suyo, pero no estoy aquí por eso, además quien es mi padre, sí siempre ha sido un alcohólico, un tipo cruel, vil e ignorante, pero eso sí, práctico, que me recomendó ir para que creyeran que tenía intenciones de cambiar, que estaba arrepentido, afligido, y dolido. El resultado sería que mi mujer y mis hijos me perdonaran, que en lugar de temerme, me respetaran.

¡Pero eso era hacerle al pendejo, jugarle al embustero!

Además estaba cansado de mi aburrida, frígida y estúpida mujer. Ni que decir de mis hijos. Que arrepentido me encontraba haber engendrado a esas dos bestias, igualitos a su madre. El menor me es indiferente, pero no soporto al mayor por su cobardía, por su torpeza, por su blandura, me repugna que no se atreva a partirme la madre a pesar de lo mucho que me desprecia.

La razón por la que acudí AA, no fue porque me embriago diariamente desde que cumplí los doce años. Tampoco por la recomendación de el doctor de cabecera ---timador como todos---- que dice mi hígado está hecho trisas, la verdad es que no sé, ni me importa mi enfermedad, nunca he sentido aprecio por mi mismo, soy un miserable, un ser despreciable. Estoy enfermo del hígado. ¡Me alegro!

El motivo de mi visita fue para que se diera cuenta mi familia, lo terrible y despreciable que podía yo ser estando sobrio. Mi humor era insoportable, gritaba para todo, si antes me daban ganas de madrear a quien fuera, ahora tenía pensamientos homicidas. Cuando me encontraba en casa, hacia todo lo posible por joder a los que me rodeaban, replicaba la comida, detestaba el ruido y hasta el olor de mi hogar, les puse horario de llegada a mis vástagos ---- nunca antes lo había hecho----, a mi mujer solo la dejaba ir al súper, les corte el teléfono y solo se veían programas de televisión que yo escogiera. Pero creo que nada molestaba más, que mi nuevo vicio ------- sorprendentemente adquirido en tan pocos días------- fumaba todo el tiempo y en todo lugar, una cajetilla diaria, lo hacia a la hora que estábamos todos desayunando, al hora de la comida, cagando, en el dormitorio, en fin, en todos lados, con el propósito de que el insoportable humo se impregnara en cada rincón de mi casa y si era posible, tuviera el mismo efecto en el pellejo de mis inquilinos. Pero nada me molestaba a mi más, que a ellos verlos dormir, ni con los calmantes que me recetaron para conciliar el sueño lo conseguía. Me las ingenié para que ellos me acompañaran en mi insomnio, justamente a las doce, encendía el estereo, le subía lo considerable para que el sonido llegara no solo a sus oídos, sino a sus diminutos cerebros, compartí con ellos mucha música, y durante las divertidas y angustiantes madrugadas sonó desde el Paranoid y Master of Rallity de Black Sabbath, pasando por el volumen I, II III y IV de Zepellin, aunque tenía también un propósito, -----no era chingar por chingar----- quería cultivarles con algo de música clásica, (que por cierto detestaban los muy ignorantes) por la consola se escucho Nocturno para Piano # 9 de Chopin, Tocata y Fuga de Bach, Danza Húngara de Brahms, Pequeña Serenata de Mozart, Para Elisa de Bethoven...un largo repertorio. Dormitaba un poco de 5 a 8 de la mañana, para alistarme a mi trabajo, del cual por cierto no quiero hablar, solo decir que era un burócrata odioso, grosero, amargado y sobornable.

Hoy es mi último día en AA, y estoy seguro que no volveré nunca más, estoy escuchando una última historia, se trata de un tal José González Soto, que desde el primer día que llegué, me ve con recelo. Arrepentido comenta lo mal que la paso con el alcohol, relataba como en las noches que llegaba alcoholizado, ingresaba con cautela a su casa y de forma sigilosa y discreta abría el cuarto de su esposa, se sacaba la pija y la meaba, lo mismo hacia con sus tres hijas, -----que por cierto están aquí lloriquendo y apestando a los orines aún impregnados de su cochino y subnormal padre---. No sé porque pero no es mala idea, he decidido dejar de golpear a mi esposa, no soporto verla con lentes oscuros todo el día, igualmente le evito la pena de que le anden preguntando que le paso. Que agradable será poner en práctica lo que hacia el mentado Josesito con mí querida mujer y mis encantadores hijos.

Falta solo una hora para salir de este jodido lugar, no aguanto las ganas de emborracharme, saliendo tomaré un taxi con dirección a la Marimba. Primero pediré unas cubas libres de ron, enseguida de unos tequilazas que me devuelvan esa euforia, esa plenitud y bienestar que tanto anhelo y extraño, y después…. ya Dios dirá. ¡Salud!.

Nací Adulto

A los hijos de la chingada no les basto con romperme una botella en la cabeza, patearme y arrastrarme, sino que me clavaron dos puñaladas certeras, una atravesó mi riñón izquierdo, la otra casi perfora uno de mis pulmones. No fue culpa de ellos, tampoco mía, simplemente me encontraba en el lugar equivocado, a la hora incorrecta, como casi siempre. El cuarto de hospital no esta mal, amplio, sky, aire acondicionado, olor a cuarto nuevo de hotel, buen trato, doce mil pesos al día jeje. Lo que me caga es el cuadro que tengo enfrente de mi cama, una selva con cielo azulísimo, jirafitas, rinocerontitos, leoncitos, un arroyo verdoso, niños pendejos diciéndole adiós a un globo aerostático. Me encuentro en el séptimo piso, exclusivo para niños, no se puede dormir aquí, un mocoso ha llorado toda el día, nació con problemas respiratorios, el otro se cayó de cabeza de un aljibe. Lo que no saben es que yo deje de ser un pinche niño. Nací adulto, pero ni mi madre, ni mis hermanos, ni abuelos ni nadie, puede entenderlo. Culpan a mis amigos de malas influencias, pero... ¿quién influyó en mi cuando sin querer le pique un ojo a un compañero de primaria?... nadie... simplemente él y su ojo se encontraban en el lugar equivocado a la hora incorrecta como casi siempre. O cuando me agarro la tira grafitiando un puente dizque en zona federal, lo cierto es que yo no fui, dos amigos lo hicieron, les temblaron las chichis y yo me eché la culpa.

Pase cuatro meses en el Tutelar para Menores, no la pase tan mal, tenía visitas casi diarias, mi madre las mayoría de la veces, que no hacia más que llorar, avergonzándome cuando decía cosas como ---- “ay mi chiquito, mi bebito, mi niño, te dije que esos amigos…pero yo tengo la culpa”... ----¡cállate!--- para empezar, grábatelo bien, en primer lugar ya no soy un niño, en segunda no vengas a lloriquear y por último ya te dije que ni tu ni nadie tiene la culpa, nos encontrábamos en el lugar equivocado. Y ya.

He recorrido más de diez escuelas, en todas deje buenos recuerdos, partí madres, raye oficinas de directores, incendie laboratorios, me emborrachaba casi a diario, pero también saque buenas notas, siempre en la clase de música. No se porque la gente siempre quiere encontrar culpables y culpan mi inestabilidad emocional y escolar por la repentina muerte de mi borracho padre, un buen tipo por cierto, más cuando andaba pedo. Pero a él no lo metan, nada tuvo que ver cuando la policía me detuvo a mi y a otros tres amigos con una moto prestada que resulto robada y que como consecuencia me guardaron 15 días en una cárcel de verdad, para adultos y no para niños caguengues, traicioneros y chismosos, que declararon que yo me la había robado, algo lógico, niñitos. No importa, me encontraba en el lugar equivocado, con la moto desafortunada y con amigos maricones.

Al salir, mi madre me mando con un psicólogo amigo de ella y desde la primera visita puse las cosas en claro, de la manera más sensata y cortes le dije, que no pensaba gastar mi tiempo y el dinero de mi madre, humildemente le hice saber que no estaba tratando no con un loco, sino con alguien que desgraciadamente nació en la época, lugar y tiempo desacertado y que si se quería tirar a mi madre le regalara cualquier brandy de más de 500 pesos.

Es mi último día en el hospital y el doctor ha venido repitiéndome que no me meta en problemas, que estoy vivo de milagro.

¡Está loco!

Estoy vivo porque cumpliré 16 años en Octubre. Tengo un cuerpo joven, cicatrizado pero fuerte y sano. Con mentalidad de adulto desquiciado, que sencillamente se encuentra en el lugar y tiempo errado.

Muertos por Sexys



Para crear rockanrol no se necesita depender de una banda convencional en sí, basta tener los suficientes huevos, la energía y la creatividad para cubrir las aparentes ausencias.

Interesantes duetos han existido a lo largo de la historia, los geniales y creadores del mejor folk que se haya hecho, Simon & Garfunkel, el soul de Ike & Tina Turner, la fresada de los Carpenters, por mencionar solo algunos. En la actualidad sobresalen; los new-bluseros The Black Keys, la sensacional dupla noruega de folk contemporáneo llamados King of Convenience, el dueto brutal de los Kills y por supuesto la pareja más famosa del momento, los inigualables White Stripes. Pero ninguno de los antes mencionados se reseñará en Sin Alternativa porque se ha marginado a uno de los duetos más cabrones (esa es la palabra) y se hacen llamar, Eagles of the Death Metal, integrados por Josh Homme y Jesse Hughes.

A finales de la pasada década, Josh Homme tenia una banda llamada Eagles of the Death Metal (o EofDM para rápido), cuando empezó un proyecto paralelo que ya todos conocemos (por cierto de gran éxito) llamado, Queen Of the Stone Age (QOTSA). En ese momento EofDM pasó de ser la esposa, a la amante.

Sin embargo, para el 2004, Homme, correría tras los brazos de su amante, y grabarían junto a su amigo Hughes su primer disco Peace, love, death metal.

Su condición de banda underground les otorgó buenas críticas. Fueron teloneros de Nine Inch Nails y de los Strokes entre otros.

Tardarían dos años para grabar éste, su último material discográfico, titulado Death by Sexy. Se trata de un disco totalmente rockanrolero, primitivo, desmadroso, elemental, sin concesiones, guitarras intensas pero a la vez bluseras, por un lado rural, pero por el otro sexy y bailable, la batería es tocada con un poderío y una intensidad que solo Josh puede hacerlo. Voces agudas con mucha actitud, interpretadas en su mayoría por el líder indiscutible y uno de los frontman más carismáticos de la actualidad, el gran “Devil" Hughes que también toca con gran maestría la guitarra.

Un disco que no pretende innovar, ni derrochar genialidad, simplemente divertirse con algo de garage, de rock guarro, de frescura, de metal si ser metal, de after-punk. Un disco sin afanes pretensiosos, incluso sin una búsqueda conceptual pero con una indiscutible actitud y toneladas de energía.

Contiene estupendos cortes como la divertida “I want you soo hard” (Boy´s bad news) que da inicio al álbum, la metalera “Cherry Cola”, la cachondez de “I like to move in the night”, country, blues y baile en “Solid Gold”, deliciosos riffs y poderosos batacazos en la roquer “Don´t speak”, muy a la Black Sabbath esta “Poor Doggie”, garage y rockabilly en “Chase the Devil” y la maravillosa “Shasta Beast” con toda la influencia de los Canned Heat.

El sonido de la banda ha sido denominado por Homme como “bluegrass slide guitar mixed with stripper drum beats and Canned Heat vocals”, lo cierto que el disco va desde ZZ Top, AC/DC, Black Sabbath, The Cramps, los ya mencionados Canned Heat y por supuesto los QOTSA.

El dueto se hace acompañar por Brian "Big Hands" O'Connor en el bajo, así como de algunos queenofthestoneros como David Catching en la guitarra y Gene Trautman en la batería, un instrumento que se alternan según los compromisos de Homme,

EofDM es rock para machines que llegan al bar a beber tequilas directos, buscando féminas deseosas de sexo en baños malolientes, mujeres hermosas bailando arriba de la mesa de billar a la velocidad de guitarras eléctricas potentísimas, sudor, fiestota y muchísimo cachondeo. ¿Se les antoja? A mi sí, y un chingo.

DULCES SUEÑOS

Estoy cansado, estoy aburrido


Podría dormir mil años


Un millar de sueños que me despertarían


Diferentes colores hechos de lágrimas

Lou Reed

No me gustan los días con sol. Me molesta la luz. Detesto la primavera y también el calor del verano. Me disgustan los colores vivos. No soporto los nuevos horarios, estropean mi rutina diaria. Mi falta de sueño, entre otras cosas, es por culpa de unos cuantos pinches diputados y legisladores que se les ha ocurrido adelantar el horario. No sé si culparlos pero creo que por su “estupenda idea” mi mente me está traicionando.

Desde hace más de dos semanas que no duermo bien. He perdido diez kilos. Me quedo dormido en mi trabajo. Mi compañera no quiere saber de mí porque soy muy breve en la cama. Lo que me preocupa es que oigo cómo los vasos se ponen a platicar en mi cocina. El refrigerador se deshiela y escucho cómo caen las gotas, segundo a segundo. Los discos compactos se arrastran por el tablero. El TV se enciende. La puerta de mi closet se abre y cierra como loca. El colmo es que alguien en la sala ojea mis periódicos y no los deja en su lugar. Desacomoda mis libros y arranca los prólogos. Soy un cobarde. No puedo enfrentarlo. Me quedo paralizado en el colchón meado y apestoso donde intento dormir. La boca seca con saliva chiclosa me impide gritar. El estómago se me comprime. Mis piernas tiemblan y enseguida se paralizan.

Imagino a Dios a mi lado arrullándome, cantando Sleepwalking de Modest Mouse, pero no. Ahora intento recordar a mi madre cuando de niño tocaba mi pelo hasta quedar dormido, tampoco. A mi abuela Pachita dándome vasos de leche caliente o remedios dudosos. Pero nada. Seguramente si estuviera aquí Mariana, las cosas serían distintas. Sería un hombre valiente, exitoso, alegre y contento. Al menos a su lado, lograba dormitar. Pero no. Solo soy un pobre diablo, un rufián, un perdedor, una mamada en pocas palabras.

Con su voz casi mordiente solía cantarme el mismo extracto de canción: “I am tired, I am weary, I could sleep for a thousand years. A thousand dreams that would awake me. Different colours made of tears.

Sutilmente acariciaba desde mi espalda hasta mi pelo, hasta sumergirnos en el goce del sexo, y lo mejor, del sueño. Pero las cosas dejarían de ser maravillosas una vez que entraba la primavera. Los llamativos colores de flores y plantas. De sol penetrante. De aves incubando. De días más largos que las noches. De desfiles y pasarelas honrando a esa maldita estación que para muchos refleja alegría y color. Para mí sólo era el pronóstico de una larga pesadilla. El adelanto de mi reloj significa el adelanto de mi desdicha, de mi insatisfacción ante todo, de mi cansancio, de mi falta de apetito, de mis dolores de cabeza, de mi mal humor, de no poder dormir. Y de que muy pronto Ella dejará de cantarme Venus In Furs al oído para cambiarlas por palabras insultantes, hirientes y divertidas. ― ¡Ya duérmete con una chingada! ¡Pinche loco de mierda! ¡Yo no oigo ni madres! ¡duéermeteee!

Tenía los brazos más preciosos que he visto, blancos, casi pálidos. Garras sucias, amarillentas y afiladas. De reojo podía ver su grande cabeza negra sobre un fondo gris. Sus ojos cafés son hermosos y grandes, con largas y lindas pestañas. Sus orejas cortas y puntiagudas. Las patas son de color blanco amarillento, más profundo en los carpos y en la parte posterior de las patas traseras. La cola también es amarilla blanquecina con pelos negros en la parte superior dorsal y en el extremo. Pude sentir la fuerza de su mandíbula, me parece que es de color marrón oscuro. También comprobé el poder de su hocico negro y sus afilados dientes desgajando mi espalda. Tengo la impresión de que se trata de una mujer-lobo. Y yo, yo soy un frágil tejón, cobarde, asustado, humillado y a punto de morir. Logro voltearme, hasta poner mis diminutas garrillas con toda mi fuerza en su peludo cuello. Aprieto con más fuerza… más fuerza…creo que lo estoy logrando…ya casi. Siento un putazo…gritos…más gritos. Insultos:

― ¡Qué te pasa, pendejo, suéltame!

--- ¡Me estás asfixiando, hijo de tu chingada madre!

--- ¡Me quieres matar, pendejo o que te pasa!

---- ¡Jamás se te ocurra volver a ponerme una mano encima, idiota!

---- ¡Me largo, cabrón!

― ¡Pinche enfermo!

Sería la última vez que toqué ese precioso cuello, ahora ya sin pelo, pero eso sí, con las mismas garras, afiladas y listas para atacar.

Son las 4 de la mañana. Me dirijo a la ventanita de la Juárez. Pido lo de siempre. Una botella del whisky más barato. La mitad de mi último ribotril y tres copas de Vat con agua natural, será suficiente para dormir por lo menos algunas horas. Eso espero.

El fútbol y yo.

Mi relación con el fútbol ha sido como con las mujeres; un fracaso. Comencé jugando fut desde los 10 años, mi primer equipo; Los Cachorritos, un equipo mediocre conformado por vecinos de barrio, dirigidos por “Don Armando” un tipo que parecía sacado de alguna película de mafiosos italianos al estilo de El Padrino, fumaba puros apestosísimos y vestía impecables trajes de Milano exclusivamente el día de juego.

“Don Armando” me daba la oportunidad de jugar escasos 5 minutos, insuficiente espacio de mostrar mi buena relación del balón con mis piernas, eso si, esos 5 minutos los pagaba al triple porque al viejo le tenia que cargar la bolsa llena de balones, hacerme responsable de los registros, así como de los uniformes apestosos de cada uno de los jugadores, de paso y como todo el tiempo andaba alcoholizado, me mandaba siempre sin excepción a comprarle en el medio tiempo una pachita de brandy presidente “pa que calientes” decía.

Así que llego un buen sábado (día que jugábamos) todo el equipo listo para subir a la camioneta e ir a los campos, don Armando preguntando por el que cargaba la pesada bolsa de balones (ni siquiera sabia mi nombre, el cabron), me hice el que no escuchó. Revelándome le conteste “que las cargue otro gato, yo firme en este equipillo para dar goles casi hechos o por lo menos anotarlos” (es mas difícil dar un buen pase que meter un gol) se encabronó pero supo por el tono en que se lo dije que estaba tratando con una posible estrella del balompié internacional.

Jugué otros escasos minutos anotando el único gol para mi equipo con un resultado adverso, y habitual 10 a 1. Partí inmediatamente a otro equipo con aspiraciones que me darían fama, fortuna y muchas mujeres. El equipo; Los Pumitas. Por razones desconocidas y que solo le pasa a los genios, me volvieron a marginar, no dándome escasos 5 minutos sino algo peor, convirtiendo al creativo, al armador, al “diez”, en un defensa lateral, era como pedirle al pintor o al escultor que los sábados trabajara 90 minutos de albañil o cargador en el mercado de abastos. El culpable era un sotaco que lo conocían por Checo. Un tipo rarísimo (este como de alguna película de Tod Browning) físico-matemático de profesión, 40 años, soltero, estricto, obsesivo, rígido, catoliquísimo, paranoico y muy posiblemente puñal de closet.

El mentado “chequito”, nos enseño lo que menos necesita un chaval de escasos 12 años: un día karate, otro entrenamiento casi de pentatlón: pecho tierra, resistencia, salto del tigre, pirámides humanas y otras serie de peripecias. Otro día, analizar tácticamente el sistema de juego de los alemanes, para nosotros, ponerlo en práctica en la cancha. El colmo era que un día a la semana, el maldito nos obligaba a asistir a dos horas de aerobics. ¿Se imaginan a la posible estrella de la selección mexicana y jugador del Manchester United con leotardo y tratando de sincronizar al ritmo de la música?....Pero resultó, que no todo estaba tan mal, asistíamos no solo el equipo, sino las chicas que habitualmente practican esta exuberante actividad. Por un momento, tan bien se me estaba dando el aerobics y la relación con las féminas asistentes, que pensé dejar el fútbol y convertirme en instructor aeróbico.

Pero me estoy desviando del tema, porque a pesar de que estaba jugando en una posición en la que no iba a destacar y conseguir el objetivo, tuve que aguantarme por dos largos años. De los 14 a los 17 años, pase por varios equipos, pero mi falta de disciplina, de consistencia, de aficiones prematuras al alcohol me impedían desarrollar todas mis destrezas.

Este jugador lentamente desaparecía, además razonaba que un jugador con estas características no debía correr tanto, no necesitaba entre otras cosas: ensuciarse, llegar 30 minutos antes (ni que fuera cualquier jugador), ¿entrenar? para qué ¿llegar sobrio al partido?. Ja.

Elegí ídolos, dice mi madre, equivocados, futbolistas rockstar, que tenían algo de decadentes, de indecentes, de iconoclastas, o mejor dicho de perdedores, llámese un George Best, un Paul Gascoinje, o el mismo Mudo Juárez.

Aún con pocos puntos a mi favor, a la edad de 18 años, llegó mi oportunidad. Casualmente acompañe a un amigo a realizar unas pruebas para un equipo profesional. Fortuitamente traía conmigo lo indispensable, unos zapatos y short. Al final de la prueba reconocieron por fin, lo sublime, fino y delicado que trataba al balón.

Lamentablemente el gusto duro poco. Jugué un año profesional, bueno de hecho casi no jugaba. Además de todas las corruptelas que acompañan al fútbol, (sobrinos de ex jugadores, ahijados de no sé quien, etc.) mis hábitos no cambiaron mucho.

La última vez que viaje con el equipo, fue al DF, para enfrentarnos contra el Cruz Azul de tercera división, nos avisaron que iban a estar visores de otros equipos que podían interesarse en alguno de nosotros, que durmiéramos temprano y recomendaciones por el estilo, pero hice con mi compañero y amigo de toda la vida “El Chucho” lo contrario. Llamamos unas putas de un periódico que anunciaba por el precio de una, dos lindas muñecas. Que por cierto, si eran purísimas, pero de lindas muñecas tenían poco. Compramos dos botella de Casco Viejo y otra de Ron Palmas, considerable para divertirnos, lo que sabíamos seria nuestra última noche como futbolistas profesionales.

EL CAMALEÓN


“Cama cama cama cama camaleón

Yo soy el camaleón

cama cama cama cama camaleón


Yo soy el camaleón


A mi me dicen el camaleón


Porque cambio de color

Para cada situación


Yo tengo un color mejor”....

---- Los Alegres de la Sierra----

David Robert Jones, mejor conocido como David Bowie, nació el 8 de enero de 1947, en Brixton Inglaterra. A temprana edad aprendió a tocar el saxofón y comenzó a tocar en pequeños grupos de rock, influenciado por el jazz. Bowie a lo largo de su carrera se ha caracterizado por las transformaciones y la experimentación, por sus constantes cambios de estilo, de look y sobre todo por utilizar cualquier medio que tuviera a su alcance para desarrollar su capacidad creativa: no solo en la música, abarca desde el cine hasta el teatro, pasando por el diseño de ropa y la pintura. No por nada, le apodaron; el Camaleón.

Dicen que su primera influencia fue su propio hermano, Terry, que lo acerco al jazz y a escritores de la generación beat, como Kerouac y Allen Grinsberg.

En 1963 formo su primer grupo: David Jones and the King Bees y en 1966 cambia su nombre artístico por el de David Bowie, para tener una carrera en solitario.

Su carrera a partir de entonces estuvo signada por los cambios y la experimentación. Tiempos difíciles para un artista poco convencional, tocaba donde podía, o mejor dicho, donde le daban “chance”. Bowie era una especie como de marciano desesperado por hacer llegar su música. Gracias a una suma de talento y esfuerzo, el Duque Blanco, firma un contrato en 1969 con la disquera Deram Records, y con ellos edita su primer álbum, Space Odity, inspirado en la película de Stanley Kubric, “2001 una Odisea en el Espacio”. Para celebrar la llegada del hombre a la Luna, lanza el disco en Estados Unidos a través de una productora de aquel país, lo que supone su irrupción en el mercado norteamericano.

Sin duda los 70s fueron su tiempo. Un ejemplo de la modernidad, Bowie oscilaba entre la vanguardia y lo espectacular de la cultura mediática, importándole un bledo la pasada década, que regularmente cuestionaba los límites si no le cantabas al amor y la paz, o si no olías a incienso y marihuana. Pero el Camaleón, siempre buscó traspasar sus propios límites, siempre cambiando, siempre sorprendiendo. En esta misma década, se rodea de personajes emblemáticos que lo acompañaron en los diversos pasajes por los que transito su carrera artística. Desde Mick Jagger hasta Iggy Pop, desde Warhol a Lou Reed, ya sea desde un lugar de estrellas consumadas o como simbólicos exponentes vanguardistas, aparecían junto con su nombre.

Así, a lo largo de su estupenda carrera artística, ya sea con una simple guitarra acústica, con una súper orquesta, con una banda conservadora, ya sea, vestido de caballero ingles, de dama provocativa, y hasta de una especie de bizarro marciano de cabaret. David, aquel chico que nació en Brixton dio el mejor ejemplo de esa constante transformación cuando en 1972 se convirtió en Ziggy. La puesta en escena, en la que colaboró, nada menos que Linsay Kemp, mostraba un escenario construido a distintos niveles y con andamiajes que facilitaban los cambios de vestuario. Aparecían sobre las tablas no solo los Spider From Mars y los músicos, sino también el grupo de danza de Kemp. Hielo seco, luces y el espectáculo mas extravagante de rock que se haya presentado en la Gran Bretaña. Fue sin duda uno de los puntos mas altos en la camaleónica carrera de Bowie, pero las controversias no se hicieron esperar, mientras algunos (como Lou Reed) catalogaron el espectáculo como el mas maravilloso que habían visto, otros no dudaron en repudiarlo, criticas encarnizadas sobre la estrella de rock y el sobrepeso de ese Kemp que bajaba con disfraz de ángel, mientras Bowie cantaba, “Star Man” para cerrar con una versión sollozante de “Over the Rainbowl”.

Bowie, no se privo de nada: teatro, cine, música y cuanto medio expresivo se le pusiera enfrente.

Ziggy Stardus, Sugragette, Changes, Fame, Ashes to Ashes, Fashion, Heroes, Modern Love, y una larga lista de temas que se acrecientan con cada nuevo disco nuevo han quedado como marca registrada de un artista que, de tan influenciado, se ha vuelto uno de los mas influyentes.

Una de sus últimas polémicas, la protagonizo al lado del novelista William Boyd, un episodio por demás creativo y significativo. Reuniendo a la crema del mundo artístico de Nueva York, presentaron la biografía de un “Nat Tate”, un pintor exquisito y depresivo, que luego de quemar toda su obra, decide quitarse la vida a sus escasos 31 años. Muchos comentaron la estupenda obra y otros, inclusive, hacían alarde de haberla visto. La gala terminó con Bowie legitimando la cuestión leyendo fragmentos de la biografía escrita por Boyd. Días después se conoció la verdad: Nat Tate jamás existió. Esta broma no hizo mas que dejar en ridículo cierto aspecto del mundo del arte, y peor aún, a los críticos inoportunos.

Tal pareciera que este duque no tiene fronteras, David Bowie es un símbolo de la época más turbulenta y destellante de la historia de la música moderna. Un tipo que parece resistir el paso del tiempo con solvencia, siempre en constante movimiento. Paginas importantes en la historia de la música de las ultimas décadas, es gracias a él. Una figura de culto por su pasado, admirado por su presente, vigente como ningún otro. Siempre un paso adelante. En contracorriente.

Siempre controvertido; algunas veces, alternativo; otras, pragmático; de ves en cuando, comercial; siempre vanguardista, equilibrado, y extremista a la vez… por siempre, David Bowie, el camaleón!


31 RAZONES PARA DESCONFIAR DE JOHN LENNON


Chava Munguía

El 8 de diciembre se celebra el trigésimo aniversario luctuoso de John Lennon. Un tipo polémico, contradictorio, soberbio, supersticioso, mandilón… humano al fin y al cabo. Un artista importante en la música del siglo XX... hasta ahí. Pero hay quienes se afanan en vanagloriar a sus “ídolos”. Vaya que ponerle el nombre a una calle de su artista favorito es ya exagerado. Pues bien, en Morelia, una calle de la ciudad llevará el nombre del famoso músico. A propósito del aniversario, aquí un pequeño"tributo"....

1.- Porque se atribuyó canciones que eran de Paul MacCarney. “An old fiancé on mine”.

2.- Por piratearse frases que eran de Ringo. “I´ve got blister in my fingers”, con que finaliza Helter Skelter.

3.- Porque lo convirtieron héroe de la clase trabajadora y vivía en un lujoso departamento. El edificio Dakota, en Nueva York.

4.- Por contradictorio. No es posible que un hombre celoso, machista, violento, amenazante, haya escrito “Woman”, una canción que habla sobre la igualdad y el respeto a la mujer.

5.- Que se dijera de izquierda y votara por gobernantes conservadores para reservar el orden económico en Gran Bretaña.

6.- ¿Mártir de la paz?. Si como no. Se encerró en un hotel cinco estrellas con Yoko, se pasó una semana acostado, con servicio al cuarto, visitas de personalidades de la farándula sesentera y compuso “Give Peace a Chance” . Que bonito.

7.- Compuso “Beatiful Boy” dedicado a su segundo hijo Sean, que recientemente declaró que había días en que su padre lo golpeaba y otros en que lo trataba con ironía.

8.- Por preferir al hermano menor Sean por encima del mayor Julian, incluyendo la herencia. (Como hermano mayor que soy, Siempre se debe dar preferencia al primogénito, siempre.)

8.- ¿Rebelde? No era más que un mandilón rockstar, refugiándose cinco años bajo el férreo control de su esposa, la terrible y calculadora Yoko Ono, con el pretexto de dizque cuidar a su hijo Sean y cocinando pasteles, mientras su querida mujer hacia el trabajo administrativo, por cierto incalculable, al momento de su muerte recibía alrededor de 50 mil dólares diarios por regalías.

9.- Por su soberbia y pendejes. Ya que dejó que su esposa se entrometiera en la vida de los Beatles ocasionando su rompimiento.

10.- Por pronunciarse a favor de la paz y el amor en el mundo. "Le costaba a la vez mucho encontrar de algún modo paz y amor para su primera familia, para mi madre y para mí". Escribió alguna vez su hijo Julian. Pobrecito.

11.- Por imaginar un mundo con paz, amor, solidaridad y sin posesiones, cuando al mismo tiempo patrocinaba con dinero a la guerrilla urbana católica irlandesa (el IRA). Por cierto Imagine no es más que un piano tan monótono como el que haría cualquier estudiante de practica.

12.- Por haber participado según informes confidenciales de Cannibaltwist en una cantidad descomunal de sexo, drogas y alcohol. Presentando también testimonios de mujeres que aparecieron admitiendo noches salvajes no sólo con John, sino a la vez también con los otros tres Beatles. Que vergüenza para la decencia y las buenas costumbres.

13.- Por haberse dejado manipular (hasta en eso) por la viuda negra Yoko, en aquel famoso Lost Weekend (en realidad un año y medio) en donde le enjaretó a un John desesperado a la secretaria de la pareja, la china-estadounidense que sería su sombra y su nalguita. En ese famoso año y medio perdido, una amante consentida que reportaba diariamente a Yoko Ono. Pero además se la paso bebiendo, montando broncas en Los Ángeles y componiendo lo que sería sus siguientes tres discos. Bueno, así hasta yo me dejaba manipular.

14.- Por supersticioso. Perdió la amistad de George Harrison a quien siempre le tuvo un cariño inmenso, ya que Lennon no acudió a una audiencia legal para definir el destino de los discos, las canciones, las regalías, porque su horóscopo le anunciaba un día difícil.

15.- Por andar coleccionando discos piratas de los Beatles. ¿Con tanto dinero John?

16.- Por realizar todas las actividades públicas en pareja. Que hueva.

17.- Por fascinarle la vida de eremita del multimillonario Howard Hughes.

18.- Por elitista y mamón. Compró todos los asientos de primera clase del avión, cuando Yoko lo enviaba solo a aquellos viajes-rituales sobre numerología y quien sabe que más pendejadas.

19.- Por tirar al gato que más amaba por el balcón.

20.- Por ser más famoso que Jesucristo.

21.- Por programas de TV y especialmente de radio (Los años maravillosos, La hora de los Beatles, y de vez en cuando, Los clásicos del rock) que se dedican a recrear y recordar todos los putos días la misma música y la vida de este músico (y los otros 3). Que repugnante.

22.- Porque todos los grupillos de cualquier bar se dedican a tocar los covers de los títulos de Lennon.

23.- Porque le dio alas a Brian Epstein manager de los Beatles que se consumía en una relación homosexual por John y terminó suicidándose por preferir a Yoko Ono.

24.- Porque le disgustaba que la prensa (gorrona como siempre) disfrutaba a costillas de los Beatles de los tragos y las prostitutas gratis. Yeah!

25.- Por quejarse y chismear a John Wenner fundador de la revista Rolling Stone que fue llevado a usar heroína por el mal trato que recibieron él y Yoko por parte de los otros tres Beatles. Que sufrido, seguramente le tuvieron que rogar.

26.- Por haberse cambiado el apellido de Winston por el de Ono. Que cursi.

27.- Por su “humildad y sencillez”. Algún día él mismo Wennner le preguntó que si se consideraba un genio a lo que Jonh contesto “Si yo soy unos de ellos”.

28.- Aunque este punto no es de Lennon en sí, sí lo es de la autentica villana, es decir de Yoko Ono que al leer la biografía mordaz e incisiva de Albert Goldaman “La vida de John Lennon” (que al parecer no tiene afecto alguno por Lennon como persona) intentó suicidarse por lo que estaba escrito ahí y no lo hizo. Que lastima.

29- Porque si estuviera vivo seguramente estaría haciendo duetos con Avril Lavigne o produciendo un disco a Eminem. Y seguro, seria tan nefasto como Bono o el mismo McCarney peleándose por el Super Bowl, el mundial de fútbol, o salir a un lado del Papa nazi.

30- Si, fue uno de los mejores músicos y personajes del siglo XX. Si, tuvo genialidad, talento, creatividad y éxito. Pero existe una frase de Cioran que dice, “hay mucho de farsante en aquel que tiene éxito”. Y es cierto.

31.- Porque el día de su muerte mí madre lloró y se deprimió mucho, tanto, que se olvidó de que tenía un hijo recién nacido, con tan solo dos meses de nacido. Y ese pobre desdichado....era yo.

Texto publicado en el 2008 en la revista Revés en su edición "Idolos".